La pandemia de COVID-19 está teniendo un gran impacto en los sectores de residuos y domésticos. En un principio, con el avance de la pandemia y la imposición de cierres en muchos países, los hábitos de consumo de los ciudadanos cambiaron por el “efecto quedarse en casa”. Además, la pandemia también ha provocado un aumento del consumo de plásticos de un solo uso, muchas veces por motivos de higiene y salud. Estas son las principales consecuencias de la era de la pandemia mundial, que seguirá afectando al mundo entero. A pesar de los esfuerzos realizados a nivel europeo y nacional, la cantidad de residuos producidos no muestra signos de disminución. Desvincular la generación de residuos del crecimiento económico requiere un esfuerzo considerable a lo largo de toda la cadena de valor y en cada hogar. Para que la transición a la economía circular sea sistémica, profunda y transformadora, en la UE y más allá, el proyecto propone la armonización del sistema de recogida selectiva de residuos y toda una nueva gama de servicios sostenibles, modelos de productos como servicios y soluciones digitales, que aportan un mejor calidad de vida, trabajos innovadores y conocimientos y habilidades actualizados.